Los 6 beneficios de los hilos tensores
El envejecimiento de la piel se manifiesta en nuestro rostro en forma de flacidez y arrugas, causadas por la pérdida de firmeza y elasticidad. Los años pasan y no podemos detener el tiempo, pero sí que podemos combatir sus consecuencias con tratamientos antienvejecimiento. Uno de los más populares en los últimos años es el tratamiento con hilos tensores o lifting sin cirugía, que aporta a nuestro rostro una serie de ventajas frente a otras técnicas.
Qué son los hilos tensores
Se trata de una técnica de rejuvenecimiento facial en la que se emplean unos hilos compuestos por polidioxanona, un material biológico reabsorbible y que no produce alergias. Gracias a la inserción de estos hilos en la dermis lograremos recuperar la firmeza del óvalo facial y tensar la piel del cuello. Se consigue por tanto un efecto lifting, gracias a la tensión del hilo y especialmente a la redensificación de la piel por la producción del colágeno que estimula el hilo. Por este motivo, también se conoce esta técnica como lifting facial sin cirugía.
Aunque su utilización en el campo de la medicina estética es relativamente reciente, hace tiempo que se viene utilizando esta técnica como material de sutura cardiaca. Por eso está totalmente comprobado que no producen alergias ni rechazo, ya que el material es reabsorbido por el organismo después de 6 meses. Existen diferentes tipos de hilos, que pueden ser de diferente grosor y tamaño. La elección del hilo dependerá de la zona a tratar, así como del estado de la piel y el grado de envejecimiento de la misma.
Los hilos tensores comienzan a surtir efecto desde el momento en el que son insertados, aunque los resultados empiezan a ser visibles aproximadamente un mes después y la mejoría queda consolidada a los 3 meses. El rejuvenecimiento suele durar hasta 18 meses, pero uno de los beneficios de los hilos tensores consiste en que se pueden volver a aplicar las veces necesarias para alargar al efecto a través de pequeños retoques.
Los 6 beneficios de los hilos tensores
Aunque ya hemos comentado alguno de ellos, los beneficios de los hilos tensores son múltiples. Estos son los principales a modo de resumen:
- Es una técnica segura, rápida, que no necesita hospitalización y que puede realizarse sin anestesia.
- Ofrece resultados muy naturales, puesto que estimula la producción de colágeno y recupera el grosor y la tersura de la piel. Los hilos quedan ocultos y su inserción no deja marcas ni cicatrices. Además, la expresión del rostro no se ve alterada después del tratamiento.
- Se puede combinar con otras técnicas, como la toxina botulínica, los rellenos con ácido hialurónico, la radiofrecuencia o el plasma rico en plaquetas.
- Los efectos secundarios son muy poco comunes. Como mucho, puede aparecer un pequeño hematoma o una ligera inflamación.
- No existe riesgo de rechazo ni provoca alergias.
- Permite al paciente reincorporarse de inmediato a su actividad cotidiana.
Si quieres más información sobre los hilos tensores o deseas pedir una cita puedes ponerte en contacto con nosotros sin ningún compromiso.